ANTÁRTIDA EXTRATERRESTRE - EL INCREÍBLE CONTACTO DE ROSALÍA Antártida Extraterrestre | Page 148

ANDREA VICTORIA CANO todo, al punto de la gente decirle: “Que lindo carácter tiene usted, se ve que no tiene problemas”. Rosalía no contestaba nada para no pecar de soez. Su misión era estar alerta de los mensajes de los Extras, siempre estuvo privada de su libertad, no le permitieron hacer nada de nada. En una ocasión estando Rosalía dormida a las 3 de la madrugada algo la levantó dirigiéndola al ventanal, cuál no sería su sorpresa al observar junto a las rejas del ventanal una soberana nave oscura, ella la contemplaba, la estudiaba sin sentir ninguna clase de temor, pensó en avisarle a Felipe pero antes de que ella diese vuelta la nave comenzó a elevarse, iba dejando una sombra en la pared de los edificios, la nave ocupaba el espacio de dos ventanales de 4x4, eso sería unos ocho a diez metros de circunferencia. Era una noche cerrada, cuando ella mira al cielo siguiendo el trayecto de la nave que se eleva lentamente ve un soberano redondel, como un hueco en las nubes, ese efecto lo realizan Ellos con una capa de atmosfera. Las naves que la iban a buscar tenían adentro una luz divina, el material de la nave lo desconocía, parecían estar hechas de algo muy liviano como la pluma, ella no conocía nada que se le parezca. Los días nublados para Rosalía y Felipe eran noches de “platos voladores”, estando en Buenos Aires ellos se sentaban en el Obelisco, no importaba si estaba lloviznando y los veían hasta la madrugada, era todo un “jolgorio”, después de observarlos se retiraban a dormir en una paz celestial que Ellos solo podían dar, después de esos avistamientos se podía soportar toda la miseria de este mundo. LAS VIDAS PASADAS DE ROSALÍA Estaba Rosalía en su casa de "Villa Diego" cuando algo despertó su curiosidad, esperaba a Felipe con la comida ya lista, estaba removiendo el guiso carrero que él le pedía que hiciera como "lo hacía la abuela", ya sea de fideos mostacholes, moñitos o caracoles. De pronto llega gritando y le dice: "Ayyy vieja, no sabes que me mostraron de arriba" , y le pregunta Rosalía: "¡Qué! contame" él le dice: "¡Haaa! no, sí no te lo 148