ANTÁRTIDA EXTRATERRESTRE - EL INCREÍBLE CONTACTO DE ROSALÍA Antártida Extraterrestre | Page 147
ANDREA VICTORIA CANO
cada uno al lado de ella y le dicen: “Quédese con la boca bien
cerrada, si quiere conservar a su hijo, sino va a correr la misma
suerte” . La verdad siendo ellos tan persuasivos y Rosalía tan
comprensiva, opto por ser una nena obediente y obedecer, solo pensaba
en que sí serían los Hombres de Negro quienes la visitaron esa noche.
En una oportunidad su papá la llevó a "Entre Ríos" a un vidente del
colectivo, había que caminar como veinte cuadras a campo traviesa, un
frió, lluvia, barro y al fin un ranchito, la atendió y le habló "a uno" que
estaba al lado de ella, (Rosalía también lo veía) y le dice que por qué la
molestaban, que se retiraran a otro lado y se fueron. Felipe cuando tenía
14 años también los veía pero nunca dijo nada.
Cuando Los Extras le pedían a Rosalía que escribiera las revelaciones
que le hacían, poco comprendía lo que le decían, no entendía mucho de
los significados, pero así debía ser. Sí Rosalía se quejaba porque la
comunicación con Los Extras la debilitaba físicamente, Felipe le decía:
"No te quejés, pensá en la Blavatski que debió recibir mensajes
hasta el último momento de su vida y ni siquiera estaba de
acuerdo con lo que le hacían escribir" , Rosalía leyó la historia de
esa mujer, era de la Sociedad Teosófica y escribió muchos libros y
Felipe los había leído todos y sobre su vida también, se llamaba Helena
Petrona Hahn Fadéef de Blavatski, era Rusa y al final de su vida estaba
muy enferma, pero seguía escribiendo.
Los Extras a Rosalía no la dejaban ni estudiar, ni escribir a máquina ni
coser, debido a que ella siempre se quejaba de no poder hacerlo, los
Extras le dieron un “castañazo” que le astilló la quinta vértebra, tuvo que
estar enyesada desde la ingle hasta la axila por un año, una para que
deje ya de quejarse y otra para que se le despertaran los chacras. La
cuestión es que estuvo tres años “maneada”, primero estuvo tres meses
sin mover las piernas y los brazos, los médicos decían que no iba a
volver a caminar, pero ella solo pensaba en que sí lo haría y
regresaría…cuando volvió a “jorobar” le quitaron la brújula de la
orientación (si no salía con un lazarillo se perdía). Pasa el tiempo y sigue
“jorobando” entonces le calibran el humor, así que se empezó a reír de
147