ANTÁRTIDA EXTRATERRESTRE - EL INCREÍBLE CONTACTO DE ROSALÍA Antártida Extraterrestre | Page 146

ANDREA VICTORIA CANO
personas como vos que empiezan a ver visiones hay que
encerrarlas antes que se vuelvan más locas" . Rosalía nunca más
le dijo ni una sola palabra, como él le había dado la idea fue a ver al
médico, y le dijo de plano que la internara, que ya no aguantaba más a
su marido, los maltratos psicológicos y físicos eran constantes e
insoportables, o la internaba o ella se suicidaba, el pedido era especifico,
quería estar internada en un psiquiátrico.
El médico era el mismo que atendía a su hijo y a ella, como Felipe tenía
asma y alergia, le llevó un día para que le revisara la espalda y vio que
tenía unos "longazos azules" le dice: "¿Y esto?" y le dice Rosalía: "Mi
marido ", "¿Y cómo usted lo permite?" dijo el médico, Rosalía
entonces se levantó la ropa y le muestra los de ella por defenderlo a él,
el médico le dice: "¿Y por qué no se separa?" , le pasa la tarjeta de un
abogado, Rosalía la recibe y le dice: "Bueno, pero ahora intérneme" ,
Al mes de estar internada el médico quería darla de alta pero Rosalía se
rehusaba a irse, el médico no encontraba ningún justificativo para
seguirla manteniendo como paciente en el sanatorio, pero ella sabía que
sí salía su marido estaría histérico y tan pronto estuviera en casa nada
bueno le esperaría, hasta que un día le dice: “Hágame electroshock” ,
“Cómo te voy hacer eso sino hace falta” contesta el médico,
“Bueno invente algo” dice Rosalía. El director y médico del
psiquiátrico la conocía desde antaño, además era el dueño del sanatorio,
a tanta insistencia de Rosalía accedió diciendo: “Bueno, te voy hacer
insulina al coma”. Prefería la muerte antes que regresar a su casa,
fueron en total tres meses los que Rosalía pasó internada en el
psiquiátrico, (Dada la situación en la que se encontraba Felipe estuvo
con una familia que lo enviaba al colegio, estaba en séptimo con 14 años
cumplidos).
A los veinte días de haber salido Rosalía del sanatorio, al médico le dan
el pasaporte al más allá, ella quedó como hueca, vacía. La noche del
velatorio se quedó toda la noche junto al féretro y a eso de las dos de la
madrugada entran dos señores vestidos con traje negro poniéndose
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