Los osos polares tienen adaptaciones para hacer inmersiones poco profundas cuando acechan a sus presas, nadan por témpanos de hielo o buscan algas. Están adaptados a permanecer sumergidos hasta dos minutos. La temperatura del cuerpo, que normalmente es 37 ° C (98,6 ° F), se mantiene a través de una gruesa capa de piel, una piel dura, y una capa de grasa aislante (hasta 11 cm o 4,5 cm de espesor) es la adaptacion que les permite este excelente aislamiento y los mantiene calientes incluso cuando las temperaturas bajan a -37 ° C (-34 ° F). Gracias a esto son capaces de sobrevivir en las zonas polares de los dos habitats, acuatico y terrestre.
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OSOS POLARES
OOSOS POLARES