andar por ahí | martin patricio barrios ago. 2012 | Page 90

...te vi con la sensación de que me había faltado verte a vos. Anduve por ahí, recorrí más de medio mundo y vi las montañas más altas, los ríos más tormentosos, atardeceres deslumbrantes, pájaros de colas del paraíso, caballos como de oro, flores gigantescas y nadé con los delfines en Goa, en Zanzibar, en Santiago; vi los orangutanes bañándose en el río y los elefantes jugar en la playa; vi muertos, moribundos, vi gente nacer, gritar desesperados, reírse hasta llorar, vi gente llorar, oí rezos, lenguas, alaridos, entré en los templos que los hombres construyeron por amor, por miedo, por respeto, para adorar a su dios, para medir los cielos o para matar; vi mares atestados de peces voladores, caravanas de camellos llevando sal, caravanas de refugiados, vi ojos, luces, ropas finísimas, morirse a mi hermano, bufeos, leones, me vi a mí mismo, enloquecido en el reflejo de los anteojos de aquel hijo de mil putas, campos sembrados de mariposas, gitanos del mar, vi los ejércitos del Sudán y de Somalía, vi nubes y lluvias y nevadas, vi gente comiendo perros y perros comiendo gente, vi gente que me miraba por curiosidad, por odio, por respeto, por amor, compré mi vida por 5 dólares americanos pero me había faltado verte a vos. Así que ese día te miraba, no sé si mucho, te miraba con todo... No era un cuento de los Grimm, era una carta de amor, que es casi lo mismo, claro, también la verdad se inventa y a la casualidad se la ayuda. Koïrézéna, Burkina Faso, 2008.