Dejemos huellas
Dirección:
Candela Cottitto
Celeste Sotelo
Gallo Agustina
“NO PRETENDEMOS VER
EL CAMBIO, SOLO HABER
DEJADO ALGO”
¿Qué hace el grupo misionero, a
dónde va y con quién trabaja?
En los dos años anteriores, 2014 y 2015, nuestra
misión fue en Ameghino, provincia de Buenos Aires,
mientras que este año, 2016, nuestro nuevo destino
es Olavarría, también provincia de Buenos Aires.
Después de todos los preparativos que realizamos
acá, llega el momento de poner todo en práctica y
demostrar todo nuestro trabajo y esfuerzo. La actividad principal una vez en el pueblo es ir a visitar
casa por casa, presentándonos ante las familias,
contándoles quienes somos, que hacemos e invitándolos a las actividades que vamos a realizar, informándoles el lugar y el horario.
Las actividades que realizamos allá, después de una
larga preparación, son:
Jornada de niños
Jornada de jóvenes
Trabajo solidario (refacciones en el pueblo)
Hogar de ancianos (según si hay o no en el pueblo a misionar)
Taller protegido (según si hay o no en el pueblo
a misionar).
Escuela especial (según si hay o no en el pueblo
a misionar)
Comunicación (visitamos radios y diarios para informar al pueblo de nuestras actividades).
¿Qué sentimos al misionar?
A continuación dejaremos algunos
testimonios de misioneros hablando
sobre su experiencia personal y lo
que sintieron al misionar.
“En mi caso personal fui con la
expectativa de dejar un mensaje
en el pueblo, y me lleve la sorpresa de recibir muchas mas
cosas de las que di”.
Lara Escalante.
“Misionar es un trabajo duro que
todo el grupo decide hacer,
siempre unidos y a pesar de las
piedras que pueden aparecer en
el camino, una vez que llegas al
pueblo, no te arrepentís ni por
un minuto de todo lo que pasaste, porque te das cuenta que
valió la pena”.
Sofía Godoy.
“Yo fui con la idea de ir para dar
y una vez allá me di cuenta que lo
que di no fue ni una cuarta parte
de lo que recibí. Cada momento,
cada risa, son recuerdos que valen oro”.
Ailín Gallo.
“La experiencia una vez allá, no
es ni parecida a lo que me imaginaba, supero mis expectativas
desde un primer momento. A mi
misionar me llena el alma, por
eso lo volví a elegir y lo voy a
seguir haciendo”.
Candela Cottitto.
“Creo que mi idea de ir a misionar se basaba en llegar y dar lo
que traía preparado desde el
colegio, una vez que llegue a
Ameghino me di cuenta que es
mucho más que eso. Misionar es
ir y hacer comunidad con tu grupo, con tus profesores y con
gente que no conoces, es llevarte algo de ellas y dejarles algo
tuyo que muchas veces ni vos
sabias que tenias”.
Celeste Sotelo.
“Creo que cada vez me es mas
difícil explicar lo que significa
para mi misionar, porque realmente no es algo que pueda expresar en palabras, los miles de
sentimientos que se encuentran
en una misión son únicos, el conocer y compartir no tiene precio, y llevarte sonrisas, abrazos, y personas en tu corazón
es inevitable y hermoso”.
Agustina Gallo.
“Misionar es entregar todo de
uno mismo y recibir la paz de
saber que le di algo de mi a
otro”.
Analía Fontan.