¿Cómo llegué al Counseling?... Era un
momento de quiebre en mi vida, donde
el camino laboral y académico que
estaba transitando no tenía
la
proyección de plenitud que buscaba.
Venía de la carrera de Derecho, de una
formación
en
Mediación
y
Comunicación, en base a lo cual me
dedicaba a la docencia en la carrera de
Asesor
Comunicacional
en
la
Universidad de Belgrano. Buscando
nuevos recursos para mejorar mi
desempeño docente, transité una
formación en dinámicas gestálticas
para trabajos grupales. En mis clases
en la UB, aplicaba esas herramientas,
y otras, que había incorporado,
estudiando
Programación
Neurolinguistica, que por aquella época
era una técnica, de incipiente impacto.
Un día, al terminar la clase escuché
que un alumnos le contaba a otro lo
bien que se sentía, luego de hacer esos
ejercicios, y los cambios que había
podido hacer, dándose cuenta que
obtenía
mejores
resultados
de
crecimiento personal que en su terapia,
razón por la cual pensaba dejarla.
¿Dejar la terapia? Recuerdo mi
sensación al escuchar el comentario,
en principio una ligera satisfacción que
tornó rápidamente a temor, y a enojo
conmigo al cuestionar severamente mi
competencia
para
generar
transformaciones,
que debían ser
propias de procesos terapéuticos,
conducidos
por
un
profesional
preparado para hacerlo, qué por cierto,
desde mi consideración y ética no era
yo.
Estudiando Counseling, incorporé por
primera vez la idea de la importancia de
las actitudes, del contrato y el clima
facilitador de proceso, de la comprensión
empática, de la escucha efectiva, de la
resiginificacion de los acontecimientos,
del poder de las palabras, de la
consideración
positiva
y
de
la
congruencia.
Han pasado muchos años, y con ellos
experiencias, donde pude ir aprendiendo
en prueba y error, que integrar recursos,
tiene que ver con un modo de ser
consultores más que de hacer
consultoría. He incorporado, diferentes
abordajes, pero sigo siendo desde mi
esencia una profesional del Counseling
que utiliza recursos del Coaching, y
también de otras disciplinas. Ese es mi
eje, así me defino y lo hago con el
orgullo de pertenecer, a la comunidad de
Counselors
que
nos
hemos
comprometido, con responsabilidad y
vocación al
servicio de ayuda
profesional.
Biderman, N. (17 de abril del 2015). Counseling y Coaching Una experiencia
persona.
Enfoque
Humanístico.
Recuperado
de
https://www.revistaenfoquehumanistico.com/nora-biderman-27
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