Abrigos y Alegría
Después de llamar y difundir el fuego en los
corazones de 5,000 jóvenes en el año 2010, nuestro
Dios ha expandido el ministerio Abba Perú a 11
regiones del país. La reunión de los coordinadores de
Abba para planificar Abba Perú 2016 fue un tiempo
de encuentro personal con nuestro Dios vivo.
Al final de esa reunión nosotros (los miembros de
COJ en Estados Unidos) planeamos algo especial
para los pastores. Lo que planeamos fue comprarles
un nuevo traje para cada pastor que tan duro
trabajaba para nuestro Dios. Durante los últimos 5-6
años habíamos notado que los pastores tenían puesto
exactamente el mismo traje (pantalón y chaqueta),
así que les dijimos, “Como tenemos un poco de
tiempo antes de nuestro viaje, ¿Qué les parece si
vamos a evangelizar a las calles? Por favor alístense y
nos encontramos en la puerta principal.” Así que los
pastores llegaron con la Biblia bajo el brazo, usando
la misma ropa que hace 5-6 años atrás.
Cuando llegamos a la tienda no nos quedó
otra más que decirles la verdad, y no solo se
quedaron sorprendidos sino que también estaban
extremadamente conmocionados. Con mucho gozo
y emocionados, empezaron a probarse la ropa en
distintas tallas y colores. Pero nos dimos cuenta que
algunos pastores estaban parados en una esquina
de la tienda, sin saber que hacer. Uno de ellos era el
Pastor José, el encargado del orfanato en Arequipa.
Cuando nos acercamos a preguntarle si es que no le
gustaban los colores o el estilo de la ropa, nos dijo,
“Oh no. Si me gustan. Pero no puedo comprar esta
ropa tan cara.” No importa que tanto intentamos
convencerlo, el no iba a cambiar su opinión. Estaba
resuelto a rechazar la compra. Entonces vimos unos
abrigos al otro lado de la tienda y le dijimos, “Pastor
José, estos abrigos están un poco más baratos.”
primera vez que me pongo un abrigo nuevo.” El
abrigo valía menos de US $100, y nunca pensamos
escuchar esas palabras de su boca. De un momento
a otro a todos nos sobrecogió una pena inmensa, así
que abrazamos al Pastor José y lloramos con él por
mucho tiempo, en medio de una tienda en la ciudad
de Lima.
Fue en ese momento en que escuché las palabras de
Dios en mi corazón, “Bien hecho. He esperado por
mucho tiempo a que alguien le compre esa ropa. El
ha dedicado toda su vida a los huérfanos y Yo quería
que el use ese abrigo nuevo. ¡Bien hecho!”
Hay aún muchos pastores en todo el mundo que, sin
tener mucho materialmente, han dedicado su vida
entera al servicio de Dios y de Su reino. Nuestro
Dios no los ha olvidado, y nosotros tampoco
deberíamos hacerlo. El ministerio “Cuervo de Amor”
ha estado trabajando duro para alcanzar a muchos de
estos pastores necesitados que están ministrando a Su
pueblo en Su temor. ¿Qué tal tú? ¿Te unes a nuestra
causa?
Pruébese uno de estos.” El pastor entonces se dirigió
hacia esa sección y después de haber chequeado los
precios, se probó uno y dijo, “Si insisten voy a elegir
este. No sé como agradecerles. ¡Muchas gracias!”
Le dijimos, “Wow, le queda perfecto. Se le vé muy
bien. ¿Podría darse la vuelta para tomarle una foto?”
Pero el pastor José no se movía. Ahí, parado frente
a la pared, las lágrimas le corrían por las mejillas.
Le preguntamos que le pasaba, y él respondió, “Es
que nunca he usado algo así en toda mi vida. Es la
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