Digital publication | Page 13

La mayoría de los hombres eran reclutados a los frentes de batalla, ya que cada día aumentaban más y más el número de bajas en las batallas. Es ahí donde entra la mujer a reemplazar a los hombres en los cargos que habían dejado. En Alemania a mujer empieza a trabajar en la industria armamentista, en los bancos, en el campo, entre otros. No obstante en este país hubo resistencia inicial en darle empleo a las mujeres y no fue hasta 1915 que su reclutamiento serio en verdad comenzó. Igualmente, incluso allí había poco entusiasmo por parte de los empleadores en el hecho de que las mujeres se incorporaran a la fuerza laboral.

Precisamente, en Alemania las mujeres llegaron a representar el 90% del personal en hospitales, y entraron a jugar un papel importante en labores administrativos en masa (oficinas de gobierno). Más adelante, las mujeres comienzan a trabajar en fábricas, transporte y en fabricación de armas. De hecho, en las plantas de producción de la organización Krupp, el 40% de la demografía obrera eran mujeres en 1918. En Berlín y en la industria de uniformes militares trabajaban 25.000 obreras. Al finalizar el conflicto las mujeres constituían el 35% del personal industrial en Alemania.

Fue de esta manera, en la que las mujeres verdaderamente empezaron a demostrar su gran potencial y a dejarle claro a los hombres que ellas también podían con estos cargos y estas responsabilidades. Además, es importantísimo tener en cuenta que la admisión femenina generó un cambio de perspectiva respecto a la visión de desigualdad de géneros. Además de trabajar largas jornadas, las mujeres debían de cuidar a sus familias y servir en su rol de madres; pues hacían más que los hombres en estos tiempos difíciles.

Por otra parte no todo fue precisamente bueno para ellas al trabajar, ya que aunque se suponía que iban a recibir salarios iguales a los de los hombres esto raramente ocurrió. Los salarios femeninos por trabajos parecidos a los masculinos se mantuvieron bajos, aunque sí fueron mayores a los de los trabajos tradicionales de las mujeres. Además las mujeres se veían negativamente afectadas por el peligro de algunos trabajos como el de la fabricación municiones, ya que había riesgo de envenenamiento por TNT o explosiones accidentales.

ALEMANIA